Las toallas mantienen tu cuerpo limpio. Pero el uso frecuente requiere un lavado frecuente. Para que las toallas sirvan y conserven su atractivo durante mucho tiempo, es necesario lavarlas, blanquearlas, plancharlas y secarlas adecuadamente.
Antes del lavado, las toallas se clasifican por tipo de tejido y color. Primero se quitan las toallas muy sucias de grasa y otras manchas. Puede utilizar una lavadora seleccionando el modo de remojo previo o remojar las toallas en un recipiente aparte.
El siguiente paso es seleccionar el modo de lavado, aclarado y centrifugado. Luego viene cargar el tambor de la lavadora. A pesar del volumen declarado por los fabricantes, no conviene cargar la lavadora al máximo. Para un lavado óptimo, utilice el 80% de la capacidad del tambor. Es decir, si dicho volumen es de 5 kg, es mejor cargar 4 kg de ropa.
Lavado de toallas de baño de rizo, bambú y velour:
Bambú y fibra modal – temperatura 30-40°C;
Algodón, lino, microfibra: 40-60°C;
Terciopelo – 40°C;
Se usa detergente líquido;
Modo de centrifugado: 800 rpm.
Lavar paños de cocina:
Productos coloreados: 40°C;
Toallas blancas – 60°C;
Modo de giro – 800-1000 rpm;
Modo de lavado - "algodón";
Utilice un detergente universal.
Al elegir el modo de lavado, centrifugado y el detergente, es necesario tener en cuenta el material del que está hecha la toalla. El algoritmo de lavado de manos se puede complementar con métodos adicionales para eliminar las manchas y dar frescura a las toallas. Las manchas difíciles se eliminan con lejía y remojo previo.